Capitulo II
¿Y este sentimiento?
¿Y este sentimiento?
Sigo aquí. Han pasado algunos meses y la verdad no me convence este lugar. Pero creo que he encontrado un motivo, una pequeña niña, es linda pero le tengo miedo. Algún día me atreveré a hablarle.
Era un jueves a las 9:15 de la mañana la vi. Ella igualmente me miraba fijamente, ambos dijimos “hola” y por un momento en mi pequeñísima vida me sentí feliz, no fue una gran conversación que digamos, pero al fin di un paso.
Una semana después. Ella de nuevo esta ahí, en los columpios, es hora de entrar en acción. -¿Cómo te llamas?-. Ella respondió – Gaby, y tu?-.
Tan difíciles se me hicieron mis primeras palabras que no supe que responder, ella se inclino y siguió columpiándose. Días mas tarde me saludo por mi nombre, yo le dije -¿Quién te dijo mi nombre?- Ella dijo que había preguntado a algunos de mis compañeros. Me extrañaba tener esas conversaciones tan breves, pero un día nos encontramos sobre las llantas de colores. Y platicamos durante todo el recreo, se me hizo eterno y fue muy agradable. -¿Qué te gusta jugar?, ¿Tienes bici?...-.
De un día para otro todo había cambiado, no me molestaba tanto ir todas las mañanas a ese horrible lugar, aunque se me hacia eterno la llegada del recreo.
Semanas después, paso algo grandioso, ella tomo mi mano, y todo dio vueltas, se sintió tan bien, era un niño y no se que fue eso que se movió en mi que no me importaba dar vueltas junto a una niña.
Para diciembre, todo era frió, se acercaban las vacaciones (yo ni siquiera sabia que era eso, pero mi madre lo decía con emoción) llego el día, la maestra dijo –Niños, hoy es el ultimo día de clases, nos vemos el próximo año...-.
Final? De que esta hablando, al parecer no fue tan malo todo esto, pero y que pasara.
Llegada la hora del recreo estuve con ella. -¿Sabes que hoy es el ultimo día?, ella respondió – Si-.
Que pasara?. –No lo se-. Ambos nos quedamos en silencio.
De pronto llego la navidad, y yo con mi familia esperando a Santa. Yo no aguantaba mucho y para las 10 me quedaba dormido, solo despertaba en la mañana y veía el pinito lleno de regalos. Las fiestas navideñas fueron grandiosas, no hay mucho que contar de ellas, pero fue bueno estar con la familia de nuevo.
Principios de Enero. Estoy de vuelta aquí, que sucede, ¿no era el final?. Por la mañana y sin muchos ánimos que digamos, después de unas largas vacaciones de pasármela jugando. Al menos sabia que había algo bueno esperándome.
Entrando la vi, le dije -hola, ¿como estas?- Ella no me vio muy feliz.
Tuvimos una platica extraña, me dijo que ya no podía ser mi amiga.
-¿De que estas hablando?-
Ella no entiende que es necesario que se quede aquí. Camino y se marcho cabizbaja, yo no me contuve y huí hacia las puertas, ya estaba cerrado, no podía salir, me aferré lo mas que pude a esas rejas llenas de ilusiones.
No había mas que decir, seria el comienzo de algo triste en mi vida de nuevo. El tiempo nunca hizo bien, y créanme que no lo ara. Las personas no cambian, lloro a los 4 años y aunque lo intente en este futuro no lo dejo de hacer.
En mi futuro la vida no ha cambiado mucho, tengo pesadillas, que en algún momento pudieron ser alegres momentos o con la esperanza de que en un futuro aun mas lejano se conviertan en Déjà vu’s felices.
Pero esto ya corresponde a otro fragmento de historia.
[...]
Era un jueves a las 9:15 de la mañana la vi. Ella igualmente me miraba fijamente, ambos dijimos “hola” y por un momento en mi pequeñísima vida me sentí feliz, no fue una gran conversación que digamos, pero al fin di un paso.
Una semana después. Ella de nuevo esta ahí, en los columpios, es hora de entrar en acción. -¿Cómo te llamas?-. Ella respondió – Gaby, y tu?-.
Tan difíciles se me hicieron mis primeras palabras que no supe que responder, ella se inclino y siguió columpiándose. Días mas tarde me saludo por mi nombre, yo le dije -¿Quién te dijo mi nombre?- Ella dijo que había preguntado a algunos de mis compañeros. Me extrañaba tener esas conversaciones tan breves, pero un día nos encontramos sobre las llantas de colores. Y platicamos durante todo el recreo, se me hizo eterno y fue muy agradable. -¿Qué te gusta jugar?, ¿Tienes bici?...-.
De un día para otro todo había cambiado, no me molestaba tanto ir todas las mañanas a ese horrible lugar, aunque se me hacia eterno la llegada del recreo.
Semanas después, paso algo grandioso, ella tomo mi mano, y todo dio vueltas, se sintió tan bien, era un niño y no se que fue eso que se movió en mi que no me importaba dar vueltas junto a una niña.
Para diciembre, todo era frió, se acercaban las vacaciones (yo ni siquiera sabia que era eso, pero mi madre lo decía con emoción) llego el día, la maestra dijo –Niños, hoy es el ultimo día de clases, nos vemos el próximo año...-.
Final? De que esta hablando, al parecer no fue tan malo todo esto, pero y que pasara.
Llegada la hora del recreo estuve con ella. -¿Sabes que hoy es el ultimo día?, ella respondió – Si-.
Que pasara?. –No lo se-. Ambos nos quedamos en silencio.
De pronto llego la navidad, y yo con mi familia esperando a Santa. Yo no aguantaba mucho y para las 10 me quedaba dormido, solo despertaba en la mañana y veía el pinito lleno de regalos. Las fiestas navideñas fueron grandiosas, no hay mucho que contar de ellas, pero fue bueno estar con la familia de nuevo.
Principios de Enero. Estoy de vuelta aquí, que sucede, ¿no era el final?. Por la mañana y sin muchos ánimos que digamos, después de unas largas vacaciones de pasármela jugando. Al menos sabia que había algo bueno esperándome.
Entrando la vi, le dije -hola, ¿como estas?- Ella no me vio muy feliz.
Tuvimos una platica extraña, me dijo que ya no podía ser mi amiga.
-¿De que estas hablando?-
Ella no entiende que es necesario que se quede aquí. Camino y se marcho cabizbaja, yo no me contuve y huí hacia las puertas, ya estaba cerrado, no podía salir, me aferré lo mas que pude a esas rejas llenas de ilusiones.
No había mas que decir, seria el comienzo de algo triste en mi vida de nuevo. El tiempo nunca hizo bien, y créanme que no lo ara. Las personas no cambian, lloro a los 4 años y aunque lo intente en este futuro no lo dejo de hacer.
En mi futuro la vida no ha cambiado mucho, tengo pesadillas, que en algún momento pudieron ser alegres momentos o con la esperanza de que en un futuro aun mas lejano se conviertan en Déjà vu’s felices.
Pero esto ya corresponde a otro fragmento de historia.
[...]
firsttt love!!
ResponderEliminarDelicioso como uno se enamora cuando nisiquiera sabe lo que es estar enamorado.
Yeah, amo estos pedacitos de historia! Creo que dentro del margen de la poesía , la lirica, la literatura, y tantas parafernalias más, el relato [de un suceso real] de alguien que conozco es una de las experiencias más interesantes que conozco.
Yeah :D
Sabes, es curioso, estuvimos en el mismo kinder? Porque ayer (o fue antier?) fui por Alex y me hicieron esperar aproximadamente media hora... entonces me senté en el asta (no en el asta ¬¬, sino en la base) y tuve un flashback bien interesante. Resulta que la última vez, según recuerdo, que estuve sentado en dicho lugar, fue con mi "novia" (o lo que sea que haya sido) del kinder hace más de 10 años!
Voy a volver para tomarle una foto al lugar y colgarla en mi pared. Deberías decirme si estuviste en el Pablo también, porque seria divertidisimo imaginar tu historia ya con escenario incluido.
Saludos! :D